Hablar sobre las necesidades de los centros de estudiantes y de cómo estos deben estar encaminados es muy complicado, para no decir imposible.
Los organismos que representan a las masas son medios vivientes, los cuales nacen, crecen y se reproducen de manera orgánica.
No podemos decidir por medios cohesivos como deben ser su desarrollo. Es poco lógico atinar a un modelo marxista ideal, pero también es muy arriesgado dejar que las cosas fluyan sin sentido, copiar un modelo de republica en cambio es correcto y ágil, donde la legitimidad y soberanía del mismo esta dada por la totalidad de su electorado, quienes de manera acertada defenderá el bien común.
En la actualidad debido a las políticas partidistas, avaricia y la desinformación no se esta dando este ejercicio. Por lo tanto el estudiante universitario no tiene la costumbre de ejercer sus derechos, cosa que no es sorprendente, sabiendo que en los secundarios y escuelas medias no se forma ciudadanos aptos para dichas actividades. Es alarmante la falta de espacios para desarrollar la conducta y disciplina de un ciudadano.
Modificar el sistema de educación es algo complejo y que no nos compete, pero dejar de hacer campaña y desarrollar medios útiles para el crecimiento del ciudadano como tal es posible. Hay que crear espacios para la interacción e intercambio de ideas entre las personas(extensión), ya que esta es la única manera “económica” de poder permitirle a la comunidad conocerse, defenderse y así adiestrarse para poder participar en un sistema no ideal, pero real.
1 comentario:
Coincido casi en todo, te diría(lo de los centros de estudiantes reproduciéndose entre ellos me da un poco de asquito, jajaja). El problema que veo con el modelo de república es que por ahora, que yo sepa, es sólo eso: una idea que acaso no ha llegado nunca a ser exitosamente implementada. Dicho lo cual, coincido plenamente con que el único camino para alcanzar ese ideal (o de inventar algún otro modelo con posibilidades de éxito) es crear espacios para la comunicación. Hay toda una pedagogía del silencio: nos enseñaron a no opinar, a no meternos. Incluso hay innumerables dispositivos dedicados a que no aprendamos a escuchar (ni a leer,ni a mirar). ¿Quién se asombra de las deficiencias en "lectura y comprensión de textos" cuando al mismo tiempo enseñan a leer sin leer, a escuchar sin escuchar, a responder sin pensar (sí, "responder" y "pensar" son, o deberían ser, una misma cosa)? En fin, este comentario era únicamente para decirte que como siempre me da esperanza enterarme que hay gente (inteligente) que piensa en todas estas cosas. Y me da mucho orgullo que una de esas personas sea justamente mi hermano.
Un abrazo grande.
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